El río miño va crecido y la tarde
soleada, es un buen pretexto para salir de casa y hacer una
excursión. Salimos en dirección a Arbo por la PO-400, después de
unos kilómetros llegamos al cruce que conduce a Portugal, seguimos
esta carretera y antes del puente tomamos un desvío que nos acerca
al río miño y a las pesqueiras construidas no se sabe cuando,
hoy
supongo solo se pesca lamprea pero en tiempos se pesco varias
especies de pescados fluviales, una gran riqueza. Observamos estas
construcciones en los dos lados del río, dejamos el lugar y
retornamos al cruce, seguimos por la PO-400 al cruce de Mourentan ,
tomamos el desvío y llegamos al puente sobre el río deva, un puente
del siglo XVIII que se encuentra en el camino de Ribadavia a Tui,
esto por si solo le convertiría en uno de tantos puentes pero lo que
lo hace especial es el episodio que en la guerra de la independencia
acaeció en este lugar hoy olvidado solo dos placas recuerdan a los
vecinos que ese día perdieron vida y casa después de luchar todo un
día contra una división de dragones franceses, solemos festejar el
día de la reconquista de Vigo pero nos olvidamos de los ciudadanos
anónimos. Después de visitar el lugar seguimos camino a la PO-400
en dirección a Creciente, llegamos a Albeos y paramos al borde de la
carretera al lado un peto y cruceiro,
dejamos el coche y nos
dirigimos a las ruinas o lo que queda del que fue monasterio de San
Paio,
debió tener cierta importancia pues aunque queda poca cosa los
trabajos de la piedra son muy hermosos, dejamos el lugar
preguntándonos sobre desamortización y sus consecuencias, volvemos
sobre nuestros pasos y como nos queda al lado visitamos la iglesia de
San Xoan de Albeos con un tímpano bien trabajado y un entorno muy
bien cuidado.
La tarde toca a su fin y nosotros tomamos la PO-940 en
dirección a la Cañiza y de aquí por A-52 a casa.