Seguimos camino a cabo estay en donde disfrutamos del espectáculo que suponen las Islas Cies, los acantilados y el pequeño faro,
continuamos a lo que era el motivo principal de nuestra escapada Monteferro,
artillería de costa,
recorremos el lugar los cañones como fantasmas de otro tiempo y los barracones abandonados, en el entorno nos encontramos una zona con mesas y bancos de piedra a la sombra de pinos y eucaliptos limpio y cuidado una buena obra de la “comunidade de montes de Monferro”,
bajamos al pequeño faro y los acantilados que mas parecen de “a costa da morte”, el paseo se hace agradable pero tenemos que seguir y tomamos dirección a Panxón en donde paramos para visitar el Templo Votivo do Mar según proyecto de Antonio Palacios,